VACUNAS Y SU IMPORTANCIA.

¿QUÉ ES UNA VACUNA?

Las vacunas son productos biológicos diseñados para estimular y fortalecer el sistema inmunológico humano frente a determinadas enfermedades infecciosas. Estas preparaciones contienen una forma debilitada o inactiva de un patógeno (como un virus o una bacteria) o partes de él (como proteínas virales) que desencadenan una respuesta inmune en el cuerpo sin causar la enfermedad en sí. El objetivo de la vacunación es preparar el sistema inmunológico para reconocer el patógeno y combatirlo eficazmente si una persona entra en contacto con él más adelante.

¿CUÁL ES SU IMPORTANCIA?

Las vacunas son efectivas para prevenir enfermedades infecciosas graves y potencialmente mortales. Al estimular el sistema inmunológico, las vacunas ayudan a prevenir la infección y, así, evitan que las personas enfermen gravemente o incluso mueran a causa de enfermedades; además de contribuir activamente a la erradicación de enfermedades, como lo es actualmente la viruela, que se vio erradicada en el año 1980 luego de campañas de vacunación a gran escala por todo el mundo.

Las vacunas desempeñan un papel fundamental en la gestión y control de pandemias y epidemias (entiéndase epidemia como aquella enfermedad que se propaga rápida y activamente en un lugar determinado) ; es una herramienta esencial para prevenir brotes de enfermedades infecciosas. Cuando una población está vacunada contra una enfermedad específica, es menos probable que se propague el patógeno, lo que reduce el riesgo de un brote. Esto es especialmente importante en situaciones de alta transmisión, como las pandemias, es decir "una enfermedad epidémica que se extiende a muchos países o que ataca a casi todos los individuos de una localidad o región." 

- La vacunación masiva puede ayudar a reducir la carga de enfermedad y la mortalidad durante una pandemia. Aunque las vacunas pueden no prevenir completamente la infección, a menudo reducen la gravedad de la enfermedad.

- La vacunación generalizada en una población contribuye a la inmunidad colectiva, que es esencial para proteger a quienes no pueden recibir la vacuna debido a contraindicaciones médicas.

-  Los grupos de población más vulnerables, como los ancianos, las personas con enfermedades crónicas y los trabajadores de la salud, a menudo son los más afectados por pandemias y epidemias. Las vacunas pueden proporcionar protección a estos grupos de alto riesgo.